ACTIVIDADES / PEQUEÑAS PIEZAS DESOLADAS
PRESENTACIÓN
PEQUEÑAS PIEZAS DESOLADAS
EL 29/07/2014 A LAS 19:00 HS.
CCEBA SEDE FLORIDA 943


UN LIBRO DE GUILLERMO HERAS

PRESENTAN: JUAN DUARTE, CARLOS PACHECO, RUBÉN SZUCHMACHER Y EL AUTOR

LECTURAS:
AMANECE EN PUERTO MADRYN. LEE Y DIRIGE: RAÚL BRAMBILLA
EL DESPRECIO. LEE Y DIRIGEN: MARCELA FERRADAS Y HORACIO PEÑA
DIÁLOGO EN ÍTACA. DIRIGE: YOSKA LÁZARO. LEEN: AGATHA FRECO Y PEPA LUNA.

Publican: Ediciones DocumentA/Escénicas y Alción Editora

Pequeñas piezas desoladas es un conjunto de quince textos teatrales breves que presentan una mirada crítica del comportamiento humano en la sociedad contemporánea.
De diversas maneras, estos textos indagan la teatralidad extrañando la realidad de lo cotidiano y ponen de manifiesto un conocimiento profundo de la escena, de la historia del teatro y su problemática actual.
Guillermo Heras es autor, director y gestor de gran trayectoria en el teatro iberoamericano, que realiza un abordaje amplio y transversal para una escena que valora la relación fundamental del actor y el texto dramático.
Guille heras_tapa.jpg"Guillermo Heras se centra en los atributos que tiene en común el hombre con los animales y no da por supuesto cuál es el orden lógico. En "Pequeñas piezas desoladas", los animales gozan de un perfecto humanismo y los hombres de un salvajismo que no se cuestionan.
Esta tensión entre lo natural animal y lo social construido, aparece en las piezas. El teatro se muestra en su condición vulnerable, haciendo evidentes las sombras del hacer teatral contemporáneo en la violencia a la que están sometidos sus hacedores. Y en este sentido el teatro también tiene una naturaleza que puede ser violentada, quebrada, forzada. Es en esa desnaturalización que el universo trascendental del teatro, puede verse transformado en algo completamente opuesto.
(...)
En esos escenarios sociales que tensionan lo natural y lo social sitúa a sus personajes humanos y animales, que se encuentran siempre en contextos de riesgo, de abismo, de crueldad y sinsentido. Incluso explora las indefiniciones, la posibilidad de ser ambas cosas:
Ah, se me olvidaba ya no sé si soy un hombre o un cerdo.
Tanta disquisición me han convertido en un monstruo.
Cuando llega el tiempo de la matanza, me torturo
¿Si ya no te puedo comer, puedo ser comido?
Mi voz me suena a gruñido
Mi cara se distorsiona.
Mi cuerpo se trasforma

(...)
El punto de vista del animal es la posibilidad del extrañamiento, de ver la humanidad desde una otredad absoluta, ignorando aquello que por cultural es aceptado como posible, esperado. En "Pequeñas piezas desoladas el (lo) animal, interpela al hombre".
Gabriela Halac, fragmento del prólogo de Pequeñas piezas desoladas

Foto: Paula Yalú
Logos CCEBA
No Maten Al Mono Remolino